La Creatividad como Herramienta para Crear la Vida que Queremos
Hoy quiero invitarte a reflexionar sobre la creatividad como una habilidad accesible para todas las personas, que puede transformar nuestras vidas en algo único, significativo y auténtico. A menudo pensamos que la creatividad es una cualidad innata, reservada para artistas o músicxs, pero en realidad es una capacidad que se desarrolla con la práctica, como un músculo. Y, al igual que los músculos, si no se ejercita, la creatividad se atrofia.
Rompiendo el mito de la creatividad innata
Existe el mito de que algunas personas nacen creativas y que lo serán durante toda su vida. Sin embargo, la creatividad no es algo estático: es una habilidad que podemos fortalecer con intención y constancia. No se trata de esperar inspiración divina, sino de poner en práctica una actitud curiosa hacia la vida, experimentando nuevas formas de pensar y actuar.
Además, solemos encasillar la creatividad en ciertas disciplinas artísticas, como la música o la pintura, pero la realidad es que la creatividad se puede aplicar a todas las áreas de la vida. Encontrar soluciones novedosas a problemas cotidianos, reorganizar una rutina o mejorar una relación, también son expresiones de creatividad.
Creatividad como capacidad de resolver problemas
Una de las definiciones más valiosas de creatividad está ligada a la capacidad de resolver problemas de manera original y eficiente. Muchas personas se estancan en sus procesos de crecimiento personal porque tienden a usar siempre las mismas estrategias que no funcionan. La creatividad nos invita a pensar fuera de lo establecido, permitiéndonos explorar nuevas formas de abordar los desafíos de la vida, y de ese modo, abrir caminos hacia el cambio.
En mis sesiones, me encuentro con consultantes que intentan salir de un ciclo de ansiedad usando las mismas herramientas una y otra vez: evitan confrontar la situación o se distraen con exceso de trabajo o redes sociales. Sin embargo, la salida suele estar en explorar soluciones que nunca habían considerado, como crear pequeños rituales diarios de autocuidado o dedicar tiempo a la escritura reflexiva.
Creatividad: Una mezcla entre experiencia y acción
La creatividad no surge de la nada. Es una combinación entre la experiencia y la técnica, pero para que se manifieste es necesario experimentar y actuar. No puede haber creación sin acción. Incluso cuando creamos algo en nuestra mente, como una solución o una idea, estamos ya dando el primer paso en el proceso creativo.
Piensa en la silla donde estás sentada ahora mismo: antes de ser un objeto tangible, fue una idea en la mente de alguien. Lo mismo ocurre en nuestra vida: cada vez que imaginamos una versión más alineada con lo que deseamos, estamos creando los primeros bocetos de esa realidad.
Nutrir la creatividad con inspiración de otras vidas
La creatividad no significa inventar desde cero. A menudo, crear algo nuevo implica combinar de manera original cosas que ya conocemos. Esto es aplicable no solo al arte, sino también a nuestras vidas. Observar la forma en que otras personas han superado dificultades o han encontrado paz en medio del caos puede ser una fuente de inspiración poderosa para crear nuestra propia versión de éxito o bienestar.
En terapia, suelo sugerir a mis consultantes explorar relatos de personas que han superado situaciones similares a las que ellas enfrentan. Leer sobre alguien que ha encontrado su camino tras una crisis puede ser el empujón necesario para que puedan ver su situación desde otra perspectiva y encuentren nuevas soluciones. Inspirarse no es copiar, sino tomar elementos que resuenan con nosotras y adaptarlos a nuestra realidad.
El valor de experimentar y explorar
La vida creativa implica estar dispuestas a explorar caminos nuevos, incluso cuando no sabemos con certeza dónde nos llevarán. A menudo, la creatividad florece en la práctica, en el intento y error. Por eso es importante animarnos a probar cosas diferentes: ¿Qué tal si organizas tu rutina de otra forma? ¿O si buscas una actividad que te saque de tu zona de confort?
Reflexión: preguntas para nutrir Tu creatividad
Desarrollar la creatividad es fundamental para vivir una vida más plena y auténtica. Pregúntate:
• ¿Qué ideas tengo en mente que aún no he llevado a cabo?
• ¿Qué puedo aprender de las personas que me inspiran?
• ¿Qué áreas de mi vida podrían beneficiarse de un enfoque más creativo?
• ¿Qué me entusiasma tanto que pierdo la noción del tiempo al hacerlo?
• ¿Qué limitaciones me estoy imponiendo que frenan mi capacidad creativa?
• ¿De qué forma puedo integrar el juego o la experimentación en mis proyectos?
• ¿Qué actividades solía disfrutar de niña y cómo puedo retomarlas ahora?
• ¿Qué entorno o estado de ánimo me inspira a pensar de forma más libre?
• ¿Cómo puedo expresar mis pensamientos o emociones de maneras distintas a las palabras?
• ¿Qué temas o intereses me generan curiosidad actualmente?
• ¿Qué desafíos creativos me gustaría asumir sin preocuparme por el resultado?
• ¿Qué pasaría si me permitiera fracasar y aprender en el proceso de crear?
• ¿Cómo puedo hacer que mi rutina diaria sea más inspiradora y menos monótona?
Un lienzo en blanco para crear
Al nutrir nuestra creatividad, empezamos a ver el mundo como un lienzo en blanco. Cada experiencia y elección se convierte en una oportunidad para crear algo significativo. No dejes que tu creatividad se atrofie; ejercítala y transforma tu vida en un juego divertido 😁
¡Actúa ahora! ¿Qué puedes hacer hoy para comenzar a practicar este músculo llamado Creatividad? Déjame tus reflexiones en los comentarios, ¡Me encantará leerte! Un abrazo cariñoso, Belén 🧚🏼